Leyenda Origen del Vino (de la Vid)

20091006

Curiosa leyenda del vino (la Vid)

Dice que en el momento en que fué plantada la Vid por Noé, se
presentó el cachudo (satanás) a regarla y en vez de regarla con
agua, lo hizo de la siguienta manera:

Primero lo hizo con sangre de pavo real; asomadas las primeras
hojas, con sangre de mona; al aparecer los primeros racimos,
con sangre de león; y cuando las uvas estuvieron en sazón, con
sangre de chanchos.

La Vid regada con la sangre de estos peculiares animales, adquirió
los caracteres propios de cada uno:
A los primeros tragos de vino, la persona se anima, se pone de
rostro encendido, se ríe, habla alto, cuenta sus méritos, verdaderos
o falsos ... Es el pavo real que levanta la cabeza y la cola.

Si han de seguir bebiendo, el vino comienza por ofuscar el
pensamiento, el bebedor se vuelve alegre, vivaz, parlanchin,
juguetón ... es la mona la que ríe y salta alegremente.
Al poco tiempo el vino se trueca en fuego en las entrañas del
bebedor; entonces se enfurece, grita, amenaza al que se le ponga
enfrente y ¡¡cuidado!! con el que le lleve la contraria ...
es el león que sacude de un lado para otro su cola, sacude su
melena y ruge infundiendo terror.

Pero luego el coraje se tranquiliza y entonces, incapaz de
sostenerse en pie, vacila y cae entre el lodo, sus labios pronuncian
palabras incoherentes, muy parecidas a ...
gruñidos.